La ataxia espinocerebelosa (SCA) es un término que se refiere a un grupo de ataxias hereditarias, que son enfermedades neurológicas que se caracterizan por la degeneración de las células que forman el cerebelo y, a veces, la médula espinal. Por esta razón, en las ataxias espinocerebelosas hay alteraciones en la fuerza, la velocidad y la destreza de los movimientos.
La sintomatología es parecida entre todos los tipos de Ataxia aunque existen variaciones. Suelen tener en común: Ataxia (andar tambaleante), dismetría (dificultad en controlar la amplitud de los movimientos), hipotonía (disminución del tono muscular), y dificultades para hablar (disartria) y para fijar la mirada, aunque es posible que los síntomas varíen con el tiempo.
Esta patología se caracteriza por un daño progresivo, y de aparición lenta del Sistema Nervioso dando como resultado problemas motores, cardíacos, en la respiración, lenguaje etc.
Valoración logopédica en patología cerebelosa.
La evaluación logopédica en los trastornos cerebelosos tiene como finalidad conocer el dominio de las competencias lingüísticas del niño/adulto, identificar los procesos motores del habla que están alterados ,analizar sus dificultades articulatorias y prosódicas, valorar la respiración, masticación y deglución.
No existen pruebas diagnósticas estandarizadas para la valoración de la ataxia cerebelosa como tal, por lo que la evaluación del lenguaje se realizará mediante escalas de desarrollo y pruebas estandarizadas, analizando también los siguientes aspectos:
Elementos corporales y su posturalidad : tronco, cabeza y hombros
- Musculatura orofacial
- Respuestas vegetativas: risa, llanto, tos y bostezo
- Actividad motriz. Diadococinesias
- Respiración y soploAudición: atención, percepción, discriminación y memoria secuencial auditiva.
- Fonación y voz
- Órganos articulatorios y praxias: lengua, labios, maxilares y paladar
- Articulación
- Vocabulario
- Estructuras morfosintácticas
- Pragmática
- Inteligibilidad
- Prosodia
Intervención logopédica en la patología cerebelosa
El tratamiento de la patología cerebelosa en general, en el que se inscribe la disartria cerebelosa, es complicado y se necesita un tratamiento multidisciplinar. En lo referente al lenguaje, el tratamiento logopédico se ha de plantear desde que se detectan los primeros síntomas neuromusculares. Se ha de iniciar de forma gradual, incrementando progresivamente la duración e intensidad de las sesiones de trabajo adecuándose siempre a las condiciones físicas y emocionales del paciente, de su capacidad de comprensión y de las habilidades cognitivas conservadas.
Nuestro rol de logopedas no va a ser el de rehabilitación del paciente, sino la conservación y compensación de la respuesta funcional, de la coordinación motriz y de los procesos de producción verbal. Para conseguirlo, es necesario un trabajo sistemático de estimulación sensitiva de la zona orofacial y de la lengua, masajear toda esta región para activar el tono de las fibras musculares, favorecer la capacidad pulmonar y el control respiratorio, entrenar las praxias de los órganos fonoarticulatorios, ejercitar la emisión sonora, articulación, fluidez léxica, construcciones morfosintácticas, prosodia y expresión verbal.
El tratamiento logopédico en este tipo de disartrias debe contemplar los siguientes aspectos:
- Postura, tono y fuerza muscular: respuesta muscular voluntaria desde la situación de reposo, corrección postural, relajación global y segmentaria, fortalecimiento muscular y coordinación dinámica.
- Respiración : capacidad respiratoria, dinámica y coordinación respiratoria, tipo respiratorio, ritmo respiratorio, coordinación neumo – fonatoria, regulación y control de la presión espiratoria.
- Audición: percepción, atención, discriminación y memoria secuencial auditivas y conciencia fonológica.
- Fonación: mecanismos para afianzar la intensidad, el tono, el timbre y la duración de las emisiones sonoras, regulación y control del ataque glótico, modulación e inicio y final fonatorio.
- Articulación : entrenar las diferentes estructuras silábicas, los fonemas en sus diferentes posiciones, mejora del modo y punto de articulación, corregir defectos por omisión, sustitución o distorsión de fonemas, precisión en la dicción inducida y expresión verbal espontánea.
- Componentes lingüísticos: campos semánticos y fluidez léxica, construcción morfosintáctica, capacidad narrativa y expresión verbal y dominio pragmático del lenguaje.
- Prosodia: control de la velocidad, ritmo, pausas, acentuación e inflexiones tonales.
- Ayudas técnicas: puede ser muy beneficioso el uso de ordenadores, comunicadores, tabletas, juguetes adaptados, sistemas de comunicación y plataformas web de rehabilitación y estimulación neurocognitiva.
- Metodologías específicas: si fuese necesario, se incorporarán al programa modalidades terapéuticas Bobath, Tardieu, etc.